El CEO y cofundador de la compañía tecnológica israelí, explica cómo la inteligencia artificial puede mejorar la campaña de vacunación, tanto a nivel operativo como en la erradicación de fake news
Más de la mitad de la población de Israel ha recibido al menos una dosis de la vacuna contra el COVID-19. El país lidera con holgura el ranking de la vacunación global y se acerca a la normalidad a velocidad de crucero. En territorio israelí, la vacuna distribuida es casi exclusivamente la desarrollada por la farmacéutica Pfizer. Las dos dosis necesarias y la temperatura bajo cero indicada para su conservación suponen un reto logístico extra. Pese a que la población de Israel es ‘asumible’ -en torno a los 9 millones de personas- las autoridades precisan del apoyo adicional de empresas tecnológicas en la gestión eficaz de la campaña. También para romper barreras culturales y sociológicas nacidas o fortalecidas durante la pandemia. Una de estas empresas es SYN-RG-Ai, experta en inteligencia artificial (IA). “La vacunación es un ‘ballet’ logístico que involucra a muchas piezas”, asegura su CEO y cofundador, Avraham (Avi) Cohen.
Avi Cohen detalla que, a efectos prácticos, cuando llegan a un centro de operaciones de un gobierno o municipio se fijan en qué puntos de acceso son necesarios y/o están disponibles y los agrupan para tomar decisiones y actuar en tiempo real. “La metodología está basada en datos y también en conocimiento humano”. Así, la inteligencia artificial está en el centro de las operaciones para que la vacuna cubra a toda la población.
SYN-RG-Ai descubrió que las poblaciones vulnerables de Israel que vivían en áreas rurales más alejadas de los centros de distribución tenían un alto riesgo de no recibir la vacuna. “Garantizamos la difusión de información sobre la vacuna en estas zonas, el transporte a los centros de vacunación e incluso gestionamos visitas a domicilio para suministrar las dosis. Coordinamos el flujo de fondos necesarios entre las entidades gubernamentales para que muchas de estas acciones sean financiadas con agilidad y poder ejecutarlas. Son tácticas críticas también en el caso de España”, afirma Avi Cohen. SYN-RG-Ai incluso ha localizado a poblaciones no registradas a las que hay que vacunar, como trabajadores temporales o inmigrantes.
El directivo se refiere al trabajo que han acometido para luchar contra la desinformación en torno a las vacunas. SYN-RG-Ai ha favorecido “un diálogo muy intenso” con personas influyentes, rabinos y líderes de opinión (periodistas locales, médicos de la comunidad). Sirvió para preparar a la ciudadanía ante la campaña de vacunación. Los posibles miedos fueron contrarrestados con la publicación de información relevante y la supresión y seguimiento de discursos engañosos. “En Israel corrió un rumor que afirmaba que la vacuna afectaba a la fertilidad de las mujeres. No dudamos en ser agresivos para combatir estos datos erróneos. El gobierno español, tanto a nivel regional como nacional, debería contrarrestar la propagación de la desinformación”.
Llegar a todas partes
Cohen explica a Innovaspain que en esta historia de éxito a la que su compañía ha contribuido, tan importante ha sido la inteligencia artificial como la experiencia previa acumulada por la empresa. “El equilibrio ideal pasa por adquirir y distribuir vacunas a un ritmo rápido mientras se limita la propagación del virus de manera inteligente. En todos estos caminos la IA es fundamental”, apunta Cohen. “Ayuda (la IA) a coordinar una operación de distribución increíblemente compleja y es capaz de detectar patrones que lleven a acciones específicas que limiten los contagios y mantengan bajo control el número de afectados”.Avi Cohen detalla que, a efectos prácticos, cuando llegan a un centro de operaciones de un gobierno o municipio se fijan en qué puntos de acceso son necesarios y/o están disponibles y los agrupan para tomar decisiones y actuar en tiempo real. “La metodología está basada en datos y también en conocimiento humano”. Así, la inteligencia artificial está en el centro de las operaciones para que la vacuna cubra a toda la población.
SYN-RG-Ai descubrió que las poblaciones vulnerables de Israel que vivían en áreas rurales más alejadas de los centros de distribución tenían un alto riesgo de no recibir la vacuna. “Garantizamos la difusión de información sobre la vacuna en estas zonas, el transporte a los centros de vacunación e incluso gestionamos visitas a domicilio para suministrar las dosis. Coordinamos el flujo de fondos necesarios entre las entidades gubernamentales para que muchas de estas acciones sean financiadas con agilidad y poder ejecutarlas. Son tácticas críticas también en el caso de España”, afirma Avi Cohen. SYN-RG-Ai incluso ha localizado a poblaciones no registradas a las que hay que vacunar, como trabajadores temporales o inmigrantes.
Eliminar fake news
“No olvidemos que la IA también es fundamental para entender por qué las personas no quieren vacunarse. Nuestra tecnología identifica y ofrece respuestas a las noticias falsas relacionadas con la pandemia y las vacunas. Una gran vacuna servirá de poco sin capacidad operativa que la lleve al 85 % de la población, pero también si es víctima de un rumor falso que genere rechazo entre los ciudadanos”, apunta Avi Cohen.El directivo se refiere al trabajo que han acometido para luchar contra la desinformación en torno a las vacunas. SYN-RG-Ai ha favorecido “un diálogo muy intenso” con personas influyentes, rabinos y líderes de opinión (periodistas locales, médicos de la comunidad). Sirvió para preparar a la ciudadanía ante la campaña de vacunación. Los posibles miedos fueron contrarrestados con la publicación de información relevante y la supresión y seguimiento de discursos engañosos. “En Israel corrió un rumor que afirmaba que la vacuna afectaba a la fertilidad de las mujeres. No dudamos en ser agresivos para combatir estos datos erróneos. El gobierno español, tanto a nivel regional como nacional, debería contrarrestar la propagación de la desinformación”.